La presidenta de México Claudia Sheinbaum descartó durante la mañanera la posibilidad de una guerra civil en Chiapas en medio de la ola de violencia y desplazamientos forzados que aquejan a la entidad.
Al ser cuestionada expresamente sobre esta posibilidad, sentenció: “no, no, no lo creo”.
Lo que sí afirmó fue que, con base en la “información que tenemos”, es importante trabajar para que no hayan desplazamientos, pacificar la zona, y evitar extorsiones y delitos que se están presentando en el estado.
Además, afirmó que ya se encuentran trabajando con el gobernador saliente de Chiapas, Rutilio Escandón, así como con el entrante, Eduardo Ramírez Aguilar, para que no vuelva a ocurrir un hecho como el reportado el pasado domingo 20 de octubre cuando asesinaron al padre Marcelo Pérez Pérez.
Sobre el homicidio del sacerdote católico, informó que su caso ya fue atraído por la Fiscalía General de la República (FGR) para su investigación.
El pasado domingo Marcelo Pérez fue asesinado por disparos de armas de fuego cuando salía de oficiar una misa transitaba por una de las calles de la ciudad de San Cristóbal de Las Casas.
En los últimos años, Marcelo Pérez había recibido amenazas de muerte, difamaciones constantes, y tenía una orden de aprensión en su contra, por su trabajo como mediador en el conflicto que se vive en el municipio de Pantelhó, donde un grupo armado y un grupo de autodefensas mantienen una disputa desde julio de 2021, año en que estalló la violencia en esta y otras regiones de Chiapas.