La policía de Ecuador, informó que los seis detenidos por el asesinato del candidato presidencial ecuatoriano Fernando Villavicencio, segundo en intención de voto para las elecciones generales del 20 de agosto, son colombianos.
Un presunto atacante que murió tras un cruce de balas con agentes de la seguridad del experiodista es de la misma nacionalidad. “Todos, incluyendo el fallecido, son colombianos”, señaló la policía al ser consultada por la AFP. Previamente, el ministro del Interior, Juan Zapata, solo había indicado a la prensa que los arrestados eran extranjeros.
Ecuador decretó el jueves el estado de excepción por 60 días y anunció que recibirá ayuda del FBI para investigar el hecho, tras el crimen cometido, “He solicitado apoyo al FBI para la investigación”, dijo el mandatario Guillermo Lasso en la red social X (antes Twitter), agregando que “en las próximas horas una delegación llegará al país”.
El estado de excepción permite el patrullaje de militares en las calles y busca garantizar el desarrollo de los comicios. Villavicencio, de 59 años y de centro que destapó varios casos de corrupción, murió el miércoles al ser baleado cuando abandonaba un polideportivo en el norte de la capital tras un mitin.
Destaca que había denunciado la semana pasada amenazas contra él y su equipo de campaña de parte del detenido líder del grupo Los Choneros, con nexos con el cartel mexicano de Sinaloa.
El director de la campaña de Villavicencio, Antonio López, planteó a su vez aplazar el debate presidencial de este domingo. “El debate debe ser diferido para que cuando nosotros decidamos” el reemplazo, éste “tenga casi similares condiciones de poder debatir” con los otros siete presidenciables, dijo en rueda de prensa. Lasso responsabilizó del ataque a miembros del “crimen organizado” y advirtió que “les va a caer todo el peso de la ley”.
El candidato de los movimientos Construye y Gente Buena era uno de los ocho presidenciables para los comicios anticipados en Ecuador, un país que fue durante décadas un oasis de paz en Sudamérica pero que comenzó a cambiar hace unos años a raíz de vínculos con cárteles mexicanos y colombianos.
La tasa anual de homicidios casi se duplicó en 2022 a 25 homicidios por cada 100 mil habitantes. Las matanzas carcelarias dejan más de 430 reclusos muertos desde 2021. El atentado del miércoles dejó también nueve heridos, incluido una candidata a asambleísta y tres policías, según el último saldo oficial. En el sitio del asesinato han dejado un ramo de rosas blancas y un cartel con una leyenda: “Malditos NARCOPOLÍTICOS pagarán. Por siempre Fernando T.Q.M.” (Te Quiero Mucho).
“Estamos de luto, (Villavicencio) era una esperanza de honestidad de nuestro país, un candidato que denunció toda la corrupción de la narcopolítica”, dijo a la AFP Ruth Flores, un ama de casa de 65 años. “Este es un crimen político que adquiere un carácter terrorista y no dudamos que este asesinato sea un intento de sabotear el proceso electoral”, añadió Lasso, que decretó luto durante tres días.