El presidente Andrés Manuel López Obrador durante su conferencia matutina destacó que aún no hay “ninguna certeza” sobre la posible llegada del huracán Beryl a México ni de la intensidad con la que lo hará.
El mandatario afirmó que se está trabajando ya en toda la parte preventiva, por lo que pidió a la gente estar “tranquila” ya que no se sabe si “va a mantener esta intensidad, esa dirección” o cuándo exactamente va a entrar.
“No van a quedar desamparados nunca, pero que también no se alteren, porque va a haber también mucho sensacionalismo, demasiada información sobre el huracán, exagerada”, pidió el mandatario a los habitantes del Caribe mexicano en su conferencia matutina.
Beryl, que ha dejado cuatro muertos en las islas del Caribe, es el primer huracán de la temporada y sienta un “alarmante precedente” porque nunca se había formado a estas alturas de año un ciclón de máxima intensidad en el Atlántico, alertó este martes la Organización Meteorológica Mundial (OMM).
El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) advirtió el lunes de un doble impacto en México, donde entre jueves y viernes tocaría tierra en Quintana Roo, el mayor estado turístico del país, y entre domingo y lunes en Veracruz, en el Golfo de México.
“Nosotros les vamos a avisar, pero hasta ahora no hay nada, está muy distante de las costas, sí se está desplazando con fuerza, pero todavía (falta)”, argumentó.
Aún así, prometió que “se está dando seguimiento al huracán”, por lo que ya desplegó al Ejército y la Marina en Quintana Roo, donde ya trabajan con la gobernadora, Mara Lezama.
“Cuando se requiera, cuando sea necesario, vamos a avisar para la protección, que desde ahora se piense que lo material siempre se recupera, lo más importante son las vidas, entonces, si se da el aviso de evacuar, va a ser ordenado”, señaló.
Las autoridades mexicanas pronosticaron en mayo hasta 41 ciclones con nombre en el océano Atlántico, con hasta 50 % más tormentas del promedio, y el Pacífico, con un 10 % más fenómenos, de los que al menos cinco impactarían al país.