Al menos 29 personas murieron en un bombardeo del Ejército israelí en una escuela ubicada en Jan Yunis (Khan Younis) en el sur del enclave palestino.
Se reporta que también resultaron heridas 53 personas, algunas de ellas en estado grave.
El Ejército de Israel anunció que está investigando “los informes sobre daños a civiles” cerca de la escuela “que se encuentra cerca del lugar del ataque”, mientras que indicó que el objetivo era un miliciano palestino.
“Esta tarde, un avión de combate atacó con armas de precisión a un terrorista del brazo militar de la organización terrorista Hamás que participó, entre otras cosas, en la masacre asesina llevada a cabo el 7 de octubre”, dice un comunicado.
Por su parte, Hamás denunció que el bombardeo ocurrió sobre una escuela que alberga a personas desplazadas es un “crimen de genocidio y limpieza étnica”.
Un video publicado por Al Jazeera documenta que uno de los misiles cayó justo mientras se desarrollaba un juego de futbol; decenas de personas estaban alrededor de la cancha y comenzaron a correr tras la explosión.
El Alto Representante de Política Exterior de la Unión Europea, Josep Borrell, condenó “cualquier violación del Derecho Internacional” y subrayó que “los responsables deben rendir cuentas”, antes de hacer hincapié en que “es imperativo alcanzar inmediatamente un alto el fuego para dar un respiro a cientos de civiles varados, liberar a todos los rehenes y entregar la ayuda humanitaria necesaria”.
“Una escuela que albergaba a familias en Jan Yunis ha sido bombardeada por las (Fuerzas de Defensa de Israel) FDI, matando a decenas de personas. ¿Durante cuánto tiempo los civiles inocentes serán los más afectados por este conflicto?”, cuestionó a través de su perfil en la red social X.
Por su parte, el Ministerio de Exteriores de Turquía indicó que “las fosas comunes descubiertas en Jan Yunis y los ataques contra cuatro escuelas allí en los últimos cuatro días son evidencia del objetivo de Israel de aniquilar totalmente al pueblo palestino”.
“Estos ataques también han demostrado que el Gobierno de (Benjamin) Netanyahu pretende sabotear las negociaciones de alto el fuego. Las autoridades israelíes tendrán que rendir cuentas ante la ley por sus acciones, que desafían todos los valores de la humanidad y el Derecho Internacional”, señaló.